CORTESIA DE AMAZON PRIME

¿Alguna vez te has preguntado cómo se vive la adolescencia en México? En Netflix abundan infinidad de programas televisivos que tratan de representar los retos y las situaciones que normalmente se viven durante esta importante etapa, que destaca porque nos tiene con las emociones a flor de piel. Creciendo nunca pude ver ni un solo programa con el que yo pudiera mínimamente identificarme, bueno tal vez solo soy aburrida, pero a veces es un poco desalentador y repetitivo para los espectadores ver la misma fórmula una y otra vez.

Adolescentes siendo interpretados por adultos de 30 años y como siempre yéndose a los extremos, ya sea en el drama como lo es el programa Euphoria, o exceso de comedia como Never have I ever, o siendo más locales como la serie mexicana Control Z que aunque se siente mas familiar por su elenco mexicano y su ambientación en México, tampoco representa a la mayoría de las adolescencias mexicanas, ya que refleja más la realidad de un grupo específico, comúnmente identificado como los whitexican, con más privilegios socioeconómicos y a menudo una falta de conciencia social. Este grupo, identificado por su piel clara, goza de privilegios asociados al racismo estructural y suele estar sobrerrepresentado en los medios.

No se habla de el desastre que es La Rosa de Guadalupe, aunque se reconoce la diversidad en el elenco así como también el esfuerzo por representar las problemáticas de diferentes extractos socioeconómicos, deja mucho que desear con las actuaciones nada realistas, las moralejas un tanto cuestionables al final del episodio o el vocabulario anticuado que usan. No Kevin, por última vez los adolescentes de México no dicen “Estás del uno, quieres ser mi chava?” o “Está papichulo!” no podemos olvidar el “Me lates un buen”. Resulta muy difícil poder identificarse con este tipo de programas que aunque muestran problemáticas reales entre los adolescentes como lo son el bullying, las fiestas, el sexo, las drogas, el descubrimiento personal e incluso temas que solian ser tabu como lo es el suicidio o la depresión.

Siempre terminan fallando terriblemente en representar esto de una forma orgánica y parece que los directores toman decisiones basadas en lo que genera más morbo. Si “Elite” te estoy hablando a ti. Aunque la esperanza no está perdida, hace unos meses tuve la fortuna de encontrarme con esta serie mexicana no muy conocida llamada Nadie nos va a extrañar que está ambientada en una prepa de la Ciudad de México en los años 90s, es una serie que cuenta con un elenco de la misma edad de los personajes que interpretan, ¿sorprendente verdad? La historia sigue a un grupo de 5 amigos Alex, Memo, Marifer, Tenoch y Daniela, quienes manejan un negocio ilegal en su preparatoria: venden las tareas y proyectos de la prepa, claramente antes de que las computadoras fueran tan comerciales y obviamente antes de ChatGPT cuando los estudiantes realmente escribían sus ensayos o bueno, pagaban para que alguien más los hiciera.

Cada personaje está bien desarrollado y construido al no caer en los típicos estereotipos, lo cual es muy refrescante además que no hablan raro o con expresiones que nadie pero nadie usa, cada personaje enfrenta una problemática diferente. Memo es un muchacho introvertido que se vuelve el chico nuevo al mudarse recientemente, y que le cuesta adaptarse y hacer amigos, ya que se ha mudado toda su vida. Alex es popular y solía ser un bully pero a raíz de la muerte de su madre tuvo un cambio de actitud. Daniela es una muchacha muy inteligente y la mejor de su clase, ella y Tenoch empezaron el negocio al ser buenos en casi todas las materias menos artes, ese es el fuerte de Marifer, quien es una joven muy creativa y con talento musical, es considerada rara por sus compañeros.

Este grupo de emprendedores fueron unidos por el negocio, pero obtuvieron algo más valioso que eso, una familia. No voy a dar más detalles sobre la serie. Pero mientras la miraba me hizo recordar mi pre-adolescencia en México, por su trama tan orgánica y los personajes también me recordaban a personas que conocí en la secundaria, la serie deja una moraleja un tanto cruda al final pero que definitivamente vale la pena ver.  Si esto último no te convence, Julieta Venegas le da la voz a una de las canciones de esta serie, espero que eso haya sido suficiente para convencerte de ir a verla, le daría una calificación de 8.5/10 y puedes encontrarla en la plataforma Amazon Prime.

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