Esto va para las muchachas que han experimentado el situationship mas agotador por un Edgar de nombre empezando con J. He visto las mentes más brillantes de mi generación en ruinas por una situationship de tres meses. Las muchachas reciben un acondicionamiento clásico para girar la cabeza cuando escuchan corridos en los autos que pasan sin poder para escuchar el estridente canto de sus antepasados que les dicen “no te hagas pendeja”.
Estudiante de tercer año de licenciatura en geografía Benito Camela reporta su versión de la historia mientras conduce junto a morenas saliendo con un combo superior de pantalones grandes y camisa para salir de fiesta. “Ahh ni siquiera es así guey. Ahora resulta que no puedo escuchar mi música ¿o que? No mames dude,” nos dijo Camela con sus ventanas criminalmente sobretintadas bajadas revelando un rosario colgado en el espejo retrovisor. Cuando le preguntamos sobre su técnica, lo que a él le llama “Beniques” se inclinó sobre nuestros periodistas para impresionar la sensibilidad detrás de esta distribución de conocimiento y en susurros dijo, “Ya tu sabe que a las chicas no le gustan que les grites por las calles y si estoy siendo honesto, a mi tampoco me gustaria si nomas andaba yo caminando mirándome así bien chula un viernes por la noche, ¿sabes? Así que solo les dejo algunas pistas de que pienso que andan rechulas.” Cuando le pedimos una demostración, quemó llanta mientras puso Sabor Fresa de Fuerza Rígida en volumen alto.
Caminando por la calle Sueño, estudiante de segundo año de licenciatura en ciencias políticas Yanni Modo, reportó tres carros distintos haciendo giros bruscos innecesarios y acelerando a quinta velocidad en la calle con límite de 25 mph. “Siempre hacen demasiado como si no todavía tienen pagos que completar. Una vez mire a alguien quemar llanta en un GMC con una calcomanía que decía UCSB MOM. No tengo idea de que intentaba hacer.”
Aun así conforme pasa el tiempo las muchachas están atormentadas por estas casualidades y recordadas de los hombres hispanos más atrevidos de sus vidas. Aquellos cuyas madres los empañan y los tratan como príncipes a su gran edad. Aquellos que te llevarán por una cita romántica el cual solo es un paseo en su auto ruidoso hasta una vista insulsa y QUIZÁS te den un pequeño tentempié. Aquellos que le regalará flores a tu madre y luego romperá contigo al día siguiente (puntos extra si es en tu cumpleaños).
Las técnicas de tortura psicológica que solo podrían haberles impartido gracias a décadas de machismo en su sangre se filtran cuando se encuentran con una chica sexy a la que le va muy bien y deja a otra de nosotras en un estado atroz.
Tal vez algún día estaremos libres del mugroso hábito de girar la cabeza pero hasta entonces, sigo volteando.
El Mariachi tiene ciertas placas memorizadas.