Con tan solo escuchar el título uno puede imaginarse los miles de temas que se pueden tocar que cientos de niñas, adolescentes y mujeres Mexicanas y Latinas podrían identificarse. Sin dar spoilers acerca del desenlace de esta historia te daré una breve lista por la cual tienes que correr a conseguir este libro inmediatamente.

Cortesía de Barnes and Noble

  • Julia es hija de padres mexicanos migrantes que viven en Chicago. Su relación con sus padres y su hermana es complicada ya que ella tiene sueños de ir a la universidad, y de convertirse en una escritora famosa que viaja por las ciudades grandes, y aunque le tiene mucho amor hacia su familia, no quiere seguir los pasos de una “hija perfecta”. La hija perfecta se queda en casa hasta casarse, la hija perfecta cuida de sus padres, la hija perfecta es modesta, Julia no quiere ser la hija perfecta mientras que su hermana sí lo es.
  • El libro empieza después de la muerte de su hermana mayor Olga. Su familia está lidiando con su muerte de diferentes maneras. Después de que Julia descubre un secreto de Olga, se da cuenta de lo poco que conocía de su hermana y decide descubrir quien era realmente Olga, ¿será que no era tan perfecta como ella pensaba?
  • La autora, Erika L. Sanchez, escribió el libro de una manera que se siente como en casa. Las frases que se dicen en casa no siempre se traducen cuando se expresan en inglés y se nota. Pero al leer este libro en español, te das cuenta de que son las mismas frases que escuchas en tu hogar o en tu comunidad latina. 
  • Como hija de padres migrantes, muchos de los temas que se exploraron resonaron bastante con mis propias experiencias. La presión de ser la “perfecta hija” puede ser abrumador, especialmente cuando tienes que sobrellevar situaciones complicadas desde una temprana edad. Por ejemplo, casos de inmigracion, seres amados indocumentados, las barreras del lenguaje, complejidades por apariencias, color de piel o hasta las barreras de tratar de vivir en un país muy diferente al que nuestros padres fueron criados. Si tu lo has vivido, Sanchez hace un hermoso trabajo al expresarlo en sus palabras a través de Julia.
  • Como Julia, en la adolescencia, yo tenía el deseo de conocer el mundo, ir a la universidad, y tomar un camino diferente. Al leer esta historia a mis dieciséis años y ahora a mis veintiún años, me doy cuenta de las similitudes entre Julia y yo a esa edad, que tal vez tú también encontrarás. ¿Ser una “mala hija” es dejar a tu familia? ¿Al querer desarrollarse académicamente a cientos de kilómetros de casa? No, solo eres humana y mereces disfrutar y descubrir el mundo. No sientas que estás traicionando o desilusionando a nadie, tienes que ponerte a ti y tus sueños primero.
  • Uno de los aprendizajes más bonitos que me ha dejado este libro es el saber que no hay una manera de ser la “hija perfecta”, es más, las hijas e hijos perfectos no existen. Con cada generación que pasa habrán diferentes sueños, diferentes pensamientos y eso no está mal, es solo la manera en la cual el mundo cambia. 

Por estas razones y muchas más te recomiendo conseguir este libro en tu biblioteca pública cercana o comprarlo en tu librería local. Es una historia de una joven que ha vivido la pérdida y el amor de una familia que está pasando por momentos fuertes pero también es una historia divertida que te tendrá entretenido hasta altas horas de la noche. 

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